martes, 1 de septiembre de 2009

RETO DEL DIABLO: MONTAÑA Y MAR

Larga temporada sin retos, y es que es lo que tiene el periodo vacacional... Y puestos a retar, ¿Qué mejor tema en la contienda que el propio de la ausencia???. Así que la Luna describe su espejo de agua y el Astado lo propio con su reino de campos y montañas...

Pese a la vuelta a la rutina...un placer continuar...



RESOLUCIÓN DEL DIABLO: MONTAÑA


Dos montañas desde las que se ve el sendero que he de seguir. Pero antes recorro las cimas buscando entre todos los recovecos. La naturaleza se eleva hacia el cielo. Su olor se mezcla con el residual, dulce y lejano perfume a miel de unas colmenas tal vez cercanas. Horizontes con sedosos amaneceres que iluminan mi espíritu y rojos atardeceres que encienden mis sentidos. Tras elevarme a sus cumbres desciendo despacio y cuidadosamente. Abajo un sitio donde refrescar mi cuerpo de los largos paseos despojándome de toda veste. Y me sumerjo disfrutando de la humedad que me rodea cuando ya ha oscurecido y los luceros brillan destacando sobre el negro terciopelo. Miro hacia arriba y veo el rostro de la luna que contempla la escena. Me tumbo y su claridad me inunda cuando se posa sobre mi...

Cambio de punto de vista, ella es así, con amplias perspectivas y múltiples líneas...En ocasiones extrema; su firme duro. Sobre la tierra se eleva el castillo...Y en la fortaleza la alta torre...y se contempla la dehesa tostada por el sol del verano. Al fondo dos cerros ligeramente desiguales destacando sobre el paisaje. Más allá el regato que humedece el terreno cercano. Y mi vista se pierde al fondo...mis sentidos se llenan aquí...Cuando, una ligera brisa, de nuevo me obsequia con esos aromas...rozando el embeleso.






RESOLUCIÓN DE LA LUNA OSCURA: MAR




El mar lo invadió todo, y aunque el ruido de las olas a veces me dolía, hubo momentos en los que sólo escuchaba tu nombre.

Y soy de tierra y, aunque lejos de él, soy de mar, sin ser sirena.

Me sumerjo en sus aguas sintiendo que el ruido de las olas es lo que mi silencio necesita, pero tú nombre sigue doliendo. Así es mi mar.

Y me sentí como ella, porque la luna nunca estuvo tan melancólica como en aquel periodo en el que se lleno de mar, y las olas no la dejaban escuchar su alma oscura y entre ola y ola intentaba respirar, pero la humedad era demasiado densa y parecía que el mar solo la quisiera para ella.

En esa nostalgia camine por la orilla, de noche, contemplándola y dejando que el mar mojara mis pies mientras me llenaba de su luz. Y lo siento, pero la preferí a ella.

Y soy de tierra, y soy de mar, pero sobre todo soy de luna, y aquella noche me recibió completa y sentí que era sólo para mi.

Ahora echo de menos mi mar, respirarlo y hundirme en él y ser delfín y ser agua, y ser sal, y ser azul y ser luna. ..

"Luna, recuérdame el mar cada vez que despiertes sobre él".



3 comentarios:

  1. Si he de ser sincero y sin desmerecer esta vez Luna Oscura ha superado a Diablo. El primer relato es mas descriptivo, es mas una estampa de un dia de excursión por un paraje idílico hermosamente resuelto, y que conste que yo soy mas de montaña que de mar; sin embargo el segundo es mucho mas íntimo y lírico, hace valer las imagenes que le brinda la mar, la noche, la luna,... para dejar al lector la huella de un amor doloroso vagamente sugerido.

    Buen trabajo de ambos, pero que quiere que os diga, esta vez mi voto es para el segundo.

    Abrazo y BESOTE

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  2. Buen reto amigos, pero será que estoy tan cansada de montañas que me quedo en el mar.
    Un beso a ambos
    Noe

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  3. uffffff..pero por Dioooosssssss, porqué me haceis ésto??...
    lo mío es el mar... de siempre...pero me encantaria vivir en la montaña con vistas al mar...en fin... que me ha gustado muchiiisimo leeros, sois geniales!!

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